Por Gabriela R. Bass | El mundo de la empresa vive como si lo mejor de la Teoría de Gestión (eso llamado management) tuviera su origen en los Estados Unidos. Pero, yo vengo hoy a desengañarte.
Lo mejor de la Teoría del Management viene de Japón. Específicamente, de TOYOTA el fabricante de coches que cambió el mundo con su Sistema de Producción Toyota (TPS – Toyota Production System).
De esa feroz observación del detalle, de ese fenomenal estudio de los sistemas, de esa dedicación obsesiva por mejorar mediante la reiteración ordenada nació una batería de conceptos que, si llegas a dominar, pueden no sólo mejorar los procesos y resultados de tu empresa, sino que pueden cambiarte más la vida que un yogui gurú influencer de internet.
“La excelencia no es un destino al que llegar, es un viaje que nunca termina”, Brian Tracy
Aquí va el resumen al que yo llegué después de casi tres décadas de dirección y gestión.
1.- Todo en el mundo conocido se organiza en sistemas
2.- Si piensas en sistemas entenderás mucho más y mejor de (casi) todo que si piensas de un modo lineal
3.- Un sistema se entiende muy bien si piensas en piezas complejas que interactúan con otras piezas complejas
4.- Para visualizar bien ese funcionamiento, imagina una cadena, que es un sistema sencillo.
Piensa ahora en una simple cadena metálica: eslabones enganchados entre sí.
Ahora vamos a ir haciendo cada vez más complejo cada eslabón, pidiéndole que allí sucedan cosas.
Si es una cadena de Distribución le pedimos que se cumpla un proceso de fabricación o de recogida, o de traslado o de entrega. ¿Lo ves?
Tenemos una cadena con eslabones donde suceden cosas, que enganchan con otros eslabones donde también suceden cosas.
Si piensas en la cadena de valor de tu empresa, supón que en cada eslabón sucede un proceso donde tú y tu gente y tus recursos, sois capaces de aumentar el valor de lo que le llega del eslabón anterior. ¿Lo estás viendo?
En esta fase recibimos este producto, aquí lo ponemos en una caja, aquí apilamos las cajas sobre un pallet, aquí flejamos el pallet, aquí lo levantamos con un toro hasta ponerlo en una estantería para que mañana con el mismo toro lo pongamos en un trailer para mandarlo a un cliente.
Sigue imaginando el proceso, por favor. No hace falta que lo describa yo. Deja de leer por un momento y sigue imaginando el proceso. El flujo de acciones hasta que todos esos procesos juntos se conviertan en dinero… ¿Lo ves?
Eso es una empresa: un gran conjunto de sistemas capaces de convertir recursos básicos en recursos complejos. Es decir: un conjunto de sistemas que va agregando valor en cada fase de un proceso.
¿Lo ves? Hacer eso con la capacidad de generar beneficio es lo que hacemos los directivos y nuestros equipos. Eso es lo que hacen las empresas.
Así que, lo que dice el Kaizen es que…
….en cada uno de esos procesos, tenemos que buscar ese detalle innecesario, ese movimiento que se hace pero que no genera valor, ese paso que se añade pero que no mejora el anterior…
Y el kaizen dice que eso, lo hagamos siempre, en todo, volviendo a observar cada sistema que ya hayamos mejorado, porque seguro es que, una vez que lo hayamos mejorado, cuando vuelva a ponerse en marcha, generará algún otro desperdicio. De modo que esa observación, esa revisión, esa mejora, ha de ser continua,
Y ahora, viene el momento en que yo quiero hacerte un regalo: esa manera de pensar va muchísimo más allá que el ser un proceso industrial
Esto que te acabo de contar vale como regla de vida
Mira los sistemas en los que estás metido: tu empresa, tu familia, tus relaciones personales, tu cotidianeidad, el modo en que comunicas, en que compartes.
Mira el modo en que vives y procura quitar, poco a poco, todo el desperdicio.
No hablemos de más, no hagamos movimientos sin sentido, no hagamos nada que no aporte algo valioso.
Es sorprendente qué fuerza te da vivir así.
Tanto como es ver cuánto puedes mejorar tu empresa si llevas el Kaizen al centro de todos tus procesos.
Espero que disfrutes de empezar a ponerlo en marcha. Verás cómo mejoras tú y tu entorno.
Gabrirela R. Bass – Mentora-Consejera de CEO familiares de Empresas Familiares. Formadora de familiares no ejecutivos
MBA por el IE , Consultora de Empresa Familiar por Fundación Nexia, y estudios de Inteligencia Corporativa y Resolución de Conflictos.
Gabriela ha desarrollado su carrera profesional en puestos de responsabilidad, principalmente como Directora General y CEO. Cuenta con más de 26 años de experiencia al frente de filiales de grandes multinacionales familiares europeas.
Hoy desarrolla Titanes con Alma, programas de Mentoría para CEO familiares y Fomarción de Familiares no ejecutivos.
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