Impacto directo en la cuenta de resultados: cómo los Interim Managers transforman las compañías

por | Sep 9, 2025

En un entorno empresarial de creciente competitividad, las compañías necesitan generar resultados medibles en plazos cada vez más cortos. La agilidad para transformar operaciones, mejorar la rentabilidad o impulsar el crecimiento comercial es hoy en un factor crítico de supervivencia. En este contexto, el Interim Management se ha consolidado como una herramienta estratégica para impactar directamente en el negocio, incorporando talento directivo senior de forma inmediata y por un periodo de tiempo determinado.

Cuando una compañía enfrenta un desafío estratégico, como recuperar rentabilidad, integrar una adquisición o escalar internacionalmente, no siempre dispone del talento interno para hacerlo con la velocidad necesaria. En este contexto, “el valor del Interim Management radica en su orientación absoluta a resultados”, asegura Jorge Ramos, Managing Partner de EIM España. El directivo también apunta que los “Interim Managers se incorporan con una hoja de ruta clara, asumiendo responsabilidades ejecutivas y desplegando acciones concretas que generan efectos inmediatos en los márgenes, los ingresos o los ahorros de costes. Además, al trabajar con objetivos medibles, la mejora en la cuenta de resultados se evidencia desde los primeros meses”.

Aunque el interim management es aplicable a múltiples contextos, este modelo directivo consigue un impacto más rápido en aquellas situaciones en las que los tiempos son determinantes y los riesgos elevados, como los procesos de transformación operativa, restructuring financiero y crecimiento internacional.

“Cuando hablamos de eficiencia operativa, un Interim Manager puede revisar la cadena de valor, renegociar proveedores, optimizar plantas o reorganizar la estructura de costes. En una situación de expansión, puede abrir mercados o reestructurar la fuerza comercial para acelerar ingresos. Y en un turnaround financiero, su labor es clave para proteger la caja y recuperar la credibilidad ante inversores y bancos. En definitiva, se trata de acortar plazos y generar impacto tangible”, explica Ramos.

Resultados medibles y aceleración de procesos

El Grupo EIM es una de las compañías de referencia en servicios de Interim Management en todo el mundo. Inició su actividad hace más de 35 años en Suiza, y se ha extendido por toda Europa, Latinoamérica, Asia y Australia. En España, acaba de cumplir 25 años de actividad con más de 1.200 proyectos ejecutados en 25 países. Una dilatada trayectoria en la que cuentan con múltiples ejemplos en los que la intervención de sus Interim Manager ha tenido un efecto directo en la cuenta de resultados.

Jorge Ramos refiere un caso muy ilustrativo, el de “una empresa industrial cotizada, con fuerte exposición internacional y una operativa muy intensiva, que se encontraba inmersa en un plan de transformación para recuperar competitividad. Incorporamos un Chief Transformation Officer interino, que en menos de un año identificó y ejecutó ahorros recurrentes superiores a 10 millones de euros. Su papel fue determinante para alinear la estrategia con la ejecución. Dinamizó los recursos internos, gestionó una consultora especializada y, sobre todo, garantizó que la compañía pudiera implementar las mejoras sin comprometer la continuidad del negocio”.

Este un ejemplo claro de cómo el Interim Management convierte la estrategia en resultados medibles y, además, es capaz de acelerar el proceso. La clave está en la velocidad de incorporación de estos ejecutivos y la experiencia previa de más de 15 años liderando proyectos similares, recuerda Jorge Ramos, y añade: “un Interim Manager no necesita una curva de aprendizaje larga: entiende el reto desde el primer día, moviliza al equipo y se centra en generar impacto inmediato. Además, la figura del partner de EIM acompaña durante toda la misión, asegurando que el diseño, la ejecución y la medición de resultados estén perfectamente alineadas.”

Intervención en áreas funcionales y entornos internacionales

El Interim Management también puede impulsar el crecimiento del negocio interviniendo en un área funcional específica, como compras o mantenimiento, tal y como describe Ramos. “Un ejemplo reciente es el de una compañía siderúrgica, donde actuamos en el área de compras de mantenimiento. La empresa necesitaba reordenar su parque de proveedores y optimizar sus procesos para ganar eficiencia. Nuestro Interim Manager lanzó nuevas licitaciones, renegoció contratos clave y rediseñó la relación con los proveedores. El resultado fue un ahorro directo superior a 500.000 euros en pocos meses. Pero lo más valioso es que logramos transformar la cultura interna, implantando prácticas de compras más estratégicas y fomentando la relación con los proveedores como socios de negocio. De esta manera, el impacto no solo fue inmediato en la cuenta de resultados, sino que dejó un legado para el futuro.”

Otro factor a tener en cuenta a la hora de valorar la incorporación de un Interim Manager es su enfoque trasnacional, y la capacidad de acelerar el crecimiento y la rentabilidad dentro y fuera de España. El máximo directivo de EIM España lo ilustra con un ejemplo dentro del sector alimentario, una empresa española con presencia global, cuyo principal mercado internacional es Estados Unidos, abastecido desde México. “La compañía necesitaba impulsar las ventas y mejorar la rentabilidad de su filial norteamericana. Nuestro Interim Manager asumió la dirección operativa de la región, logrando activar el crecimiento comercial tanto en México como en EE. UU. y llevando la rentabilidad a niveles similares a los de España. Esta intervención se reflejó de inmediato en la cuenta de resultados consolidada, además de afianzar la posición de la empresa en un mercado tan estratégico.”

Jorge Ramos, Managing Partner de EIM España.

Más allá de la consultoría

Llegados a este punto, podría parecer que el enfoque de un Interim Manager puede ser similar al de un proyecto clásico de consultoría. Pero existe una clara diferencia entre ambos servicios profesionales: la ejecución. Para Jorge Ramos, “un consultor puede hacer un excelente diagnóstico y proponer mejoras, pero el Interim Manager asume la responsabilidad de implementarlas. Es un directivo con poder de decisión, que lidera el cambio desde dentro, con la ventaja de no verse condicionado por inercias políticas o burocráticas. Por eso el impacto en la cuenta de resultados es más rápido y tangible.”

La combinación de velocidad, experiencia y foco en resultados es común a todos los trabajos de Interim Management. Cada misión arranca con un diagnóstico preciso y una hoja de ruta clara. El directivo se incorpora en cuestión de días, no de meses, y se concentra en ejecutar acciones que generen efecto inmediato, al mismo tiempo que deja una estructura preparada para sostener los resultados en el largo plazo.

En definitiva, el modelo de Interim Management se ha convertido en la actualidad en una palanca estratégica para muchas compañías inmersas en procesos de transformación.

No se trata solo de cubrir una vacante temporal, sino de acelerar el cambio con ejecutivos senior que saben hacer que las cosas pasen. El objetivo va más allá, cuando el Interim Manager finaliza su misión, la compañía no solo mejora su cuenta de resultados, sino que también adquiere nuevas capacidades para competir con éxito en el futuro.

CanalCeo
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