Los grandes cambios tecnológicos siempre se materializan antes que las normas que los regulan, lo que habitualmente genera tensiones en todos los ámbitos, incluido el laboral. Ya ha ocurrido con las redes sociales, las criptomonedas o el teletrabajo. El metaverso está llamado a ser el principal protagonista de la próxima gran disrupción, pero se trata de un fenómeno que de momento genera más incógnitas que certezas…