Durante los últimos años nos hemos acostumbrado a ver un sinfín de CEO en las redes sociales orientadas al ámbito profesional. En este tipo de plataformas, muchos profesionales liberales suelen autodefinirse como CEO, habitualmente, de incipientes proyectos empresariales que en la mayoría de los casos ni siquiera alcanzan la categoría de startups. Son los falsos CEO.