En un país de PYMES como España es habitual confundir la figura del empresario con la del directivo. Básicamente, porque la mayoría de las veces es el propietario de la compañía quien también asume su dirección. Las excepciones a esta regla son aquellos empresarios que con el paso del tiempo terminan apartándose de las labores ejecutivas, o las grandes corporaciones cuya propiedad corresponde a un grupo de accionistas. Hablamos con María Wandosell, sobre su viaje de CEO a empresaria.