¿Qué es la transformación digital?

Big Data, Machine Learning, Industria 4.0, internet de las cosas, social business… son algunas de las palabras asociadas a las nuevas oportunidades de estrategia de negocios que surgen gracias a la aparición de las tecnologías. La transformación digital es la integración de estas tecnologías digitales en todas las áreas de una empresa, cambiando fundamentalmente la forma en que ésta opera y brinda valor a sus clientes.

Si la digitalización de las empresas ya era una tarea pendiente antes de este 2020, tras la crisis mundial surgida por la pandemia del coronavirus, ser Industria 4.0 hoy se convierte en una obligación. No hay otra manera de renovarse y competir que mediante la transformación digital: o te digitalizas o desapareces.

L a transformación digital también supone un cambio cultural en las personas. Requiere que las organizaciones desafíen constantemente el status quo, experimenten y se sientan cómodas con el fracaso. Reduce los procesos que una empresa hace, automatiza el trabajo que la gente realiza y convierte el proceso 1en software. Lo que queda son datos. Después, con estos datos y herramientas, se generan ideas o propuestas de valor transformadoras.

En un mundo basado en datos, una organización puede reconsiderar muchas de sus suposiciones antiguas. Al repensar los viejos supuestos sobre un negocio, podemos llegar a diferentes lugares donde el valor u oportunidades surgen de forma diferente que en el mundo definido por el proceso.

Las mayores capitalizaciones del mercado a día de hoy proceden de nuevas organizaciones que han hecho de la tecnología y la transformación digital su razón de ser: Apple, Alphabet, Microsoft o Amazon. Compañías exponenciales que han convertido el cambio constante en su nueva zona de confort. Telefónica, otra gran empresa, define la transformación digital como “el realineamiento de tecnología, modelos de negocio y procesos, dirigido a entregar mayor valor a clientes y empleados para competir en la economía digital”.

¿Transformación digital VS personas?

La tecnología y el big data permiten a las empresas automatizar procesos. Esto influye directamente en el tiempo que los empleados dedican a realizar tareas rutinarias que pueden ser eliminadas gracias a la robotización y a nuevos programas informáticos. ¿Supone esto un riesgo frente a los empleos de muchas personas? Al contrario, ya que este tiempo es ideal para que estas personas rindan en los aspectos cualitativos de su puesto de trabajo: pensar y ejecutar procesos que realmente requieran la participación humana.

Se trata de aprovechar la tecnología para optimizar nuestro negocio. Esto supone un gran reto para la mayoría de las empresas e industrias, pero también nuevas oportunidades.

Los nuevos retos tienen que ver con la dispersión, la externalización, la visibilidad y el gobierno de los datos, para lo que se necesitan personas que los analicen. Los datos brutos por sí solos no generan información para impulsar el crecimiento del negocio. Más bien, son los análisis derivados de los datos los que crean un valor verdadero.

Las corporaciones españolas que se han sumergido en la digitalización registran un incremento en sus ventas del 39% y demuestran valores mayores a países como Francia, Alemania o Reino Unido según un estudio de CA Technologies. En mayo de 2018, Slashmobility publicó un estudio sobre el estado actual de las empresas españolas en cuanto a transformación digital: suspenden con un 4,75. Una mala nota que en 2021 deberíamos superar.

Qué es y qué no es transformación digital

Tu presencia en LinkedIn , Twitter o Facebook no es sinónimo de digitalización. La transformación va más allá. En Transformación Digital, pueden enumerarse cuatro tipos de tecnología que se unen para ser más eficientes: el Big Data, la nube, los negocios sociales y la movilidad. La transformación tiene que ver con el valor de los servicios, la mejora del modelo de negocio, la innovación , la diferenciación y las fortalezas.

Los 8 puntos clave en la transformación digital, según Miguel Ángel Trabado son:

  1. Gestión de la información
  2. Comunicación
  3. Autoaprendizaje
  4. Trabajo colaborativo
  5. Identificar tendencias
  6. Conocimiento técnico.
  7. Diseño de experiencias participativas y multicanal
  8. Formación constante: adoptar una mentalidad digital

Los datos ayudan a las organizaciones a descubrir y capturar nuevas oportunidades. Pueden predecir las tendencias macroeconómicas o los patrones de gasto permitiendo a las organizaciones agrupar sus recursos y colocarse en la mejor posición para ser los primeros en innovar. Así, la transformación digital permite crear productos que los clientes desean en lugar de forzar que a los clientes para que los compren.

Las tres “I” del Big Data

Para poder aprovechar de manera efectiva el valor que se puede obtener del análisis de datos, se debe hacer un cambio cultural en la forma en que las organizaciones abordan el análisis. Este cambio cultural se puede describir como las tres «I» del big data:

  1. Invertir en recopilar, analizar y usar datos para que las empresas eviten su extinción durante la transformación digital.
  2. Innovar con datos inexplorados previamente para crear nuevos productos y servicios, junto con mejores experiencias de los clientes.
  3. Improvisar explorando datos y encontrando un nuevo significado, que luego se convertirá en información accionable en un ciclo continuo de datos.

La transformación digital obliga a revisar todo lo que sabemos y lo que podemos hacer. Por todo ello, es necesario aplicar una iniciativa de cambio continua como cultura de empresa para que el proceso de transformación sea constante, fácil y sencillo. También será importante mantener motivado al personal de la empresa, tranquilizarles antes sus miedos y captar capital humano.