Hace cinco años solo el 12% de las empresas españolas disfrutaban de la figura de Jefe Oficial de Datos. Ahora, ese número ha crecido hasta alcanzar el 55,9%. El valor de este trabajo reside, no tanto en las labores técnicas de recogida de datos, sino en su posterior gestión y análisis de los resultados. Un escenario que ha facilitado el acercamiento de las mujeres a estos puestos, ya que el entendimiento entre personas y diversos grupos de negocios se realiza con mayor facilidad a través de empresarias, según Forbes.
La relación entre mujeres y big data aumentará las oportunidades para que estas puedan acceder a puestos de dirección, por lo que el panorama laboral de la mujer mejorará ya que actualmente solo el 35% de las españolas acceden a estos cargos, según el último estudio de eurostat. Pero quizás es más importante señalar la oportunidad que tienen las empresas para aumentar su impacto en el mundo gracias al papel de la mujer, ya que estas son más propensas a realizar actividades a favor de la sociedad y el medio ambiente. Esta visión se debe a que las formas de gestionar una compañía, entre el hombre y la mujer, son totalmente diferentes. Así lo explica Ana Fragua González Fundadora de “For WOMEN”, plataforma de ayuda a la mujer en su autorrealización. “El liderazgo en femenino es más horizontal e inclusivo, porque en general las mujeres tenemos menos ego que los hombres, ya que llevamos muchos siglos figurando en un segundo plano. Es un liderazgo más empático y emocional. Una CEO con hijos, es capaz de ponerse en la situación de una empleada que está compatibilizando con la crianza”, comenta Ana Fragua.
En este sentido, Daphne Kis, directora ejecutiva de la Universidad WorldWuant y cofundadora de Litmus Health, una plataforma de ciencia de datos para ensayos clínicos en la fase inicial, afirma que “las empresarias son más propensas a utilizar el negocio como un vehículo para el cambio social y ambiental, y son 1,17 veces más propensas a crear empresas sociales que los hombres”.
Un claro ejemplo de cómo la mujer se ocupa, al mismo tiempo, de la actividad científica y de las labores sociales, lo encontramos en Telefónica y su área pionera en investigación, “Big Data for Social Good”. Núria Oliver, directora científica de la compañía, explica que el objetivo de la iniciativa es explorar el valor de los datos de los móviles para mejorar el mundo. “Este área tiene un gran potencial y alta visibilidad externa, con colaboraciones y con instituciones de relevancia mundial como Naciones Unidas».
La mujer, al poseer más destreza para analizar datos, está consiguiendo adentrarse en el mundo de la ciencia. Es el caso de BBVA, donde un tercio de los empleados de análisis de datos son mujeres. Elena Alfaro, CEO de Data & Analytics de la compañía, afirma que «el big data hará que las empresa tomen decisiones basadas en datos, y en un futuro se llegará incluso a eliminar la toma de decisiones, como consecuencia de la automatización”. Los avances tecnológicos están provocando el cambio y la transformación tanto de los puestos de trabajo como de las maneras de gestionar una compañía.