Liderar es también defender la equidad
Ana López-Casero Beltrán es la presidenta de la nueva Asociación Retail Textil España (Arte), una alianza entre grandes compañías del sector a quienes muchas personas miran en busca de ese faro que ilumine el camino; un camino que les lleve hacia el futuro de la industria, que ha de ser sostenible y ha de ser competitiva.
Sin embargo, López-Casero no siempre se puso al servicio de la moda. Anteriormente se desenvolvió en el sector farmacéutico donde, como ella misma señala, “las mujeres están muy presentes en puestos de liderazgo gracias a muy buenas prácticas”. Son esas prácticas, de hecho, las que pone de relieve esta directiva, las que trata de hacer crecer en otros caladeros, aunque eso implique soledad y sacudir alguna que otra conciencia.
Ana López-Casero Beltrán participó el pasado 7 de noviembre en el primer encuentro Más mujeres CEO, organizado por Canal CEO en el Ateneo de Madrid para la difusión, el debate y el desarrollo del liderazgo con mirada femenina, y donde participaron algunas de las mujeres más relevantes de nuestra economía.
“La fuerza del compromiso personal es la que te mueve a liderar algo”, López-Casero.
- Una idea del liderazgo: “Mi estilo de liderazgo es muy humanista, muy cercano; me gusta empatizar con las personas, con los equipos y con los grupos de interés con los que me relaciono”.
- Un consejo inspirador: “Tener en cuenta las visiones de los demás para construir, como líder, una visión compartida que nos desarrolle y nos motive a todos”.
- Un objeto simbólico del liderazgo: “Me gustan los zapatos porque simbolizan muy bien aquello de ponerte en los zapatos del otro, concretamente las botas, por estar pegado a los problemas, a la acción, y eso me da mucha fuerza; mis botas están un poco gastadas en la punta porque me gusta emplearme a fondo”.
Cuando la equidad pasa por sacudir las estructuras
ARTE, de la que forman parte grandes marcas como Inditex, Mango, Primark o H&M, está inmersa en la negociación del ansiado convenio colectivo del comercio textil, y Ana López-Casero Beltrán, su presidenta, también.
No en vano, se trata del primer convenio nacional del sector, que aglutina a más de 100.000 trabajadoras y trabajadores. La equidad, según López-Casero, es un punto fuerte a tener en cuenta en el mismo: “Tenemos la responsabilidad de promover la equidad en un sector tan importante como es el sector textil, donde hay un 76 % de mujeres, a través de un convenio colectivo nacional que permita articular este tipo de políticas”.
Y es que, para López-Casero, el liderazgo solo puede ser humanista, por y para las personas, garante de su bienestar y transformador. Un liderazgo que impulse la igualdad, la inclusión y la equidad desde un punto de vista holístico en toda la organización.
Sin embargo, liderar de esa forma no resulta sencillo, de hecho, para esta presidenta, liderar implica soledad. Ana López-Casero Beltrán sabe bien de lo que habla. También de la fuerza que brinda el compromiso, para hacer frente a esa circunstancias y a todas las demás, aquellas a las que se enfrenta la mujer que lidera. “Yo creo que para liderar hay que ser muy valiente, porque liderar implica soledad, ir por sitios complejos, vapulear las estructuras y el statu quo, y yo creo que eso es innato a los seres humanos y que depende de la causa con la que tu estés comprometida (…), la fuerza del compromiso personal es la que te mueve a liderar algo”, explicaba durante su intervención en el encuentro de Más mujeres CEO.
En el sector del que procede López-Casero, el farmacéutico, se ha adoptado “una arquitectura de la diversidad muy poliédrica”, que ha permitido a muchas empresas hacer muchas cosas y que las mujeres estén presentes en puestos de liderazgo gracias a buenas prácticas. “Se han implementado programas de mentoring muy eficaces y dirigidos por el propio CEO”, citaba a modo de ejemplo López-Casero. Acciones efectivas que deberían contagiarse en todas y cada una de las corporaciones de este país.
“Nosotros somos hijos de la cultura del esfuerzo y de la disciplina”, López-Casero.
Sin embargo, López-Casero no solo apuesta por aquellos valores humanistas capaces de catapultar la igualdad de género en las organizaciones, sino por esos otros que permiten la completa integración de las personas, también las de diferentes edades.
De hecho, la presidenta de ARTE propone estrategias claras para solventar otros desafíos acuciantes incluso en sectores muy paritarios, por ejemplo, el salto generacional en la pirámide de prioridades: “Mis hijas me dicen que no quieren llevar mi vida porque no paro, no les motiva, no es aspiracional (…), los nuevos equipos nos están haciendo replantear la forma de ver la vida, quieren tener una vida con sentido, no solo donde trabajas o donde todo es esfuerzo, porque nosotros somos hijos de la cultura del esfuerzo y de la disciplina”. Un cambio de mentalidad que arrastra el desafío de articular, sin duda, una nueva cultura de empresa.
